Al amanecer, los días claros, las noches sin nubes, si miras atento al cielo hay un punto que desprende una lluvia de infinitos colores: lo llaman el baile de Venus.
Es un juego entre amantes.
Venus baila para el sol, fuente de vida y de muerte.
Según la astrología, la escasa distancia entre ellos permite este fenómeno. Con su espectáculo, ella quiere enamorarle pero se acerca tanto que acaba reducida a cenizas y lava.
Los días claros Venus cuenta su historia, despliega con su magia una temible advertencia:
¿cuánto estás dispuesto a pagar para alcanzar tu sueño?