Cómo aplicar tecnologías de vanguardia: Singularity University

“Número de dispositivos conectados a Internet :

– 5.000 millones en 2009

– 15.000 millones en 2015

– 50.000 millones en 2020”

En Nevada, California, Florida y Michigan cambian la legislación para admitir vehículos sin conductor»

 

“EN 2050 UN PORTÁTIL TENDRÁ LA CAPACIDAD DEL GÉNERO HUMANO COMPLETO»

 

CÓMO NACE 

En 2008, Ray Kurzweil funda con Peter Diamandis y con el apoyo de Google y la NASA, la institución académica Singularity University (SU), cuya traducción literal es “Universidad de la Singularidad”. Ray Kurzweil es futurista, inventor con más de 70 patentes, Director de Ingeniería de Google y según la revista “Forbes”: la máquina de pensar suprema. Por su parte, Peter Diamandis es doctor en Medicina por Harvard, ingeniero aeronáutico y de astronáutica por el MIT, experto en biología y fundador de más de una docena de empresas espaciales y de alta tecnología. «Singularity» es un concepto científico concebido por el mismo Kurzweil y que se refiere a la aplicación de ciencia y tecnología de punta para acelerar la evolución humana.

 

La conferencia fundacional de SU tuvo lugar en el Centro de Investigación Ames de la NASA en septiembre de 2008, donde Larry Page, cofundador de Google, puntualizó: “Actualmente utilizo un sistema de medida muy simple: ¿Estás trabajando en algo que puede cambiar el mundo? ¿Sí o no? La respuesta para el 99,99999 por ciento de la gente es “no”. Creo que necesitamos formar a la gente en cómo cambiar el mundo”.

 

QUÉ ES HOY DÍA

En Singularity University sólo caben ideas que sean capaces de mejorar la vida de, al menos, un billón de personas en un plazo de diez años. Al igual que la Universidad Invisible en los inicios de la ciencia moderna, la Singularity University busca formar e inspirar líderes de todo el mundo a fin de que utilicen el desarrollo tecnológico para mejorar la sociedad.

 

Los principales campos de conocimiento que se estudian en SU son:

  • inteligencia artificial y robótica: vehículos sin conductor, mecanización de las actividades de servicio mediante la inteligencia artificial, eliminación de los costes de producción asociados a la complejidad.
  • biotecnología y bioinformática: la combinación de dispositivos digitales con la ingeniería genética para hacer posibles bio-innovaciones en agricultura, fuentes de energía y trazabilidad de alimentos.
  • medicina y neurociencia: medicamentos diseñados a medida, regeneración de órganos y prótesis innovadoras mediante los avances en impresión 3D
  • manufactura digital;
  • nanomateriales y nanotecnología;
  • sistemas computacionales, redes y sensores y emprendimiento.

 

La misión de SU en encontrar soluciones a nueve grandes desafíos de la humanidad: medio ambiente, alimentación, energía, seguridad, pobreza, agua, salud y espacio. SU aspira a estimular el pensamiento innovador y disruptivo para que puedan resolverse estos grandes retos de la humanidad gracias al potencial de rápida aceleración de los avances en la tecnología.

 

SU cuenta con el apoyo de una amplia gama de líderes en el mundo académico, empresarial y gubernamental, incluyendo además de Google y la NASA, Autodesk , Cisco , Nokia  y la Fundación Kauffman. Entre las figuras de renombre internacional pertenecientes a la institución destacan: Daniel Kraft, uno de los mayores especialistas en inmunología y células madre; Salim Ismail, ex vicepresidente de Yahoo y fundador de varias empresas como Angstro; Rob Nail, CEO y fundador asociado de Singularity University; Brad Templeton, ingeniero de software; y Neil Jacobstein, experto en robótica e inteligencia artificial,

 

En los distintos programas de formación que llevan a cabo, inversores, directivos, emprendedores y profesionales, junto a los expertos de SU, debaten sobre cómo los avances de la investigación tecnológica conformarán nuestra vida y sociedad futura formando líderes en la iniciativa empresarial y el pensamiento progresivo.

 

LA TECNOLOGÍA Y LA INNOVACIÓN, ¿HERRAMIENTAS PARA RESOLVER LOS RETOS MEDIOAMBIENTALES DEL SIGLO XXI?

El recurso natural más valioso no es el petróleo, el oro, el agua o la tierra. El recurso natural más valioso es la capacidad que tiene el ser humano para desarrollar el conocimiento. Utilizar ese conocimiento para concebir productos, procesos o servicios nuevos o mejorados que compitan ventajosamente en los mercados, en esencia, innovar, constituye una fuente de riqueza fundamental. Ésta es la clave para hacer frente a los grandes retos medioambientales a los que nos enfrentamos y superar la escasez actual de recursos. A lo largo de la historia, hemos aprendido a superar otras escaseces y muchas adversidades a través de la innovación y la tecnología (el único recurso que no sólo no se agota sino que se expande cuánto más lo usamos). Por ejemplo, los cazadores-recolectores necesitaban un promedio de 3.000 hectáreas para alimentar a una persona; hoy día, sólo es necesario un tercio de un acre. Ello implica, un aumento de la productividad agraria de 10.000. La sostenibilidad de nuestro planeta no es un número fijo; depende de la población, del consumo y de la eficiencia. El siglo XXI es una carrera entre un consumo excesivo perjudicial y nuestra creciente comprensión sobre cómo utilizar más eficientemente nuestros recursos naturales. El desarrollo del conocimiento y la innovación nos han permitido superar enormes problemas en el pasado, no obstante, nuestros desafíos actuales siguen siendo graves. Debemos actuar, dando rienda suelta a la innovación y aprovechando los avances científicos: invirtiendo en las personas, y adoptando nuevas tecnologías, vitales aunque temidas. Por ejemplo, la vasta cantidad de datos que hoy día están disponibles afectan nuestra privacidad. Sin embargo, pueden resolver problemas tan graves como la deforestación mundial. Ya conocemos la situación actual de los bosques gracias a los mapas del cambio forestal mundial de Google Earth Engine. Trillones de mediciones científicas para poder detectar cambios en los mapas, identificar tendencias y cuantificar las diferencias. Gracias al uso de nuevas tecnologías, el consumo de agua por habitante está disminuyendo rápidamente, los bosques están creciendo en Europa y América del Norte y los niveles de contaminación están bajando ligeramente. La conservación del medio ambiente y el crecimiento en la renta per cápita no son necesariamente incompatibles. Aplicando nuestro conocimiento, invirtiendo en innovación tendremos más riqueza y un mejor planeta.